
El mapamundi, derivado del latín medieval “mappa mundi”, es la representación cartográfica de la totalidad de la superficie terrestre, esencial para la geografía y la política. A lo largo de la historia, ha evolucionado, pasando de simples trazos en tablillas de barro a complejas proyecciones cartográficas. Este artículo explora su desarrollo, los conceptos de paralelos y meridianos, y las distintas visiones del mundo a lo largo del tiempo.
El Mapamundi a lo largo de la historia:
Raíces Antiguas:
Los mapamundis, ya presentes desde el 2500 a. C., inicialmente retrataban el valle del río Éufrates. La visión cartográfica evolucionó con los antiguos griegos; Anaximandro de Mileto y Claudio Ptolomeo presentaron mapas que incluían continentes y líneas imaginarias longitudinales y latitudinales, aunque su precisión variaba.
Exploración y Desafíos:
La exploración de Asia, África y el descubrimiento de América desafiaron la percepción del mundo. Los mapas se reducían al “T en O”, más interesados en ideas teológicas y políticas que en exactitud geográfica. Diego Ribero en 1527 introdujo América y Oceanía, y en el siglo XVIII, nuevas técnicas cartográficas brindaron mayor precisión.
Paralelos, Meridianos y Proyecciones:
Red de Ubicación:
Los meridianos, líneas verticales que dividen el planeta en 360 grados, y los paralelos, líneas horizontales que indican latitud, conforman una red de coordenadas. El meridiano cero de Greenwich y el ecuador actúan como referencias clave para ubicar puntos geográficos y establecer zonas climáticas.
Proyecciones y Representaciones:
La Tierra, al no ser completamente esférica, requiere proyecciones cartográficas para crear representaciones útiles. La proyección de Mercator, aunque ampliamente utilizada, distorsiona los tamaños de los continentes, generando críticas por ser eurocéntrica. Otras proyecciones alternativas, como la de Gall-Peters, buscan abordar estas distorsiones y resaltar una visión más equitativa del mundo.
La evolución del mapamundi ha sido crucial para la comprensión del mundo y sus distintas realidades. Es fundamental que las proyecciones cartográficas sean precisas y equitativas para reflejar la diversidad global. Se requiere un enfoque más inclusivo y preciso en la representación geográfica, lo que puede ayudar a fomentar una mayor comprensión y aprecio por la diversidad del planeta Tierra.