La comunidad científica está cerca de desarrollar una vacuna contra el ébola, gracias a un nuevo estudio publicado en la revista Nature Medicine muestra que una vacuna experimental ha sido capaz de proteger a los primates de la cepa Zaire del virus durante diez meses, el periodo más largo hasta ahora.
El estudio fue realizado por un equipo de científicos del Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos (NIH) dirigidos por la investigadora Nancy Sullivan. Los científicos utilizaron una vacuna basada en dos vectores virales diferentes: el adenovirus ChAd3 y el virus modificado Ankara (MVA).
En una primera fase del ensayo, los primates recibieron una dosis de la vacuna basada en el vector adenoviral ChAd3. Ocho semanas después, se les administró una segunda dosis de refuerzo con un vector distinto, basado en el virus modificado Ankara (MVA).
Los resultados del estudio mostraron que la combinación de las dos vacunas fue capaz de proteger a los primates contra la cepa Zaire del virus durante diez meses. Los científicos subrayaron que una única dosis de la vacuna ChAd3 es suficiente para otorgar protección completa a corto plazo y una defensa parcial durante varios meses.
Los científicos del NIH trabajan con un adenovirus proveniente de chimpancés dado que muchas personas han estado ya expuestas a adenovirus humanos, por lo que su sistema inmunitario tiende a neutralizarlos.
Los autores del estudio subrayan en sus conclusiones que una rápida puesta a punto de la versión final de la vacuna podría ayudar potencialmente a contener el brote de ébola que se extiende por África Occidental.
Los resultados del estudio publicado en Nature Medicine son alentadores y sugieren que una vacuna contra el ébola está cerca de ser desarrollada. La primera fase de los ensayos clínicos en humanos, sobre 20 voluntarios sanos, comenzará con el apoyo del NIH y la farmacéutica GlaxoSmithLine en Maryland (EEUU), mientras que está previsto que se lleven a cabo pruebas paralelas en el Reino Unido.
El desarrollo de una vacuna contra el ébola es una noticia esperanzadora para las personas que viven en las zonas afectadas por el brote de ébola en África Occidental. La vacuna podría ayudar a contener el brote y salvar vidas.